martes, 29 de noviembre de 2011

ESPASMO III

LA HISTORIA DEL PANADERO


Le despertaron con bizcochos; le animaron con hielo,
les despertaron con mostaza y con berros;
le animaron con mermeladas y con juiciosos consejos,
y le pusieron acertijos para que los adivinara.

Cuando por fin se incorporó y pudo soltar palabra,
ofreció explicarles su triste historia.
Y el capitán gritó: “¡Silencio! No quiero oír ni una mosca”,
y agitó su campana con gran excitación.

Se hizo un supremo silencio. Ni un chillido, ni un giro,
apenas algún que otro lamento o gemido se oyó…
mientras el hombre a quien llamaban “¡Eh!” explicó
su calamitosa historia con antediluviana entonación.

“Mi padre y mi madre eran pobres, pero honrados.”
“¡Ahórranos todo eso!”, bramó impaciente el capitán.
“Si se nos hace de noche ya no habrá posibilidad de ver al
snark, No podemos perder ni un momento.”

“Me saltaré cuarenta años”, dijo casi llorando el panadero,
“y seguiré adelante sin hacer más observaciones
hasta el día en que me enroló en su navío
para ayudarle en la caza del snark”.

“Un tío mío muy querido (precisamente llevo su mismo
nombre) observó, cuando nos despedíamos…”
“¡Oh, sáltate también a tu querido tío!”,
exclamó furioso el capitán mientras tocaba la campana.

“Me hizo notar entonces”, continuó diciendo aquel santo
varón: “Si un snark es un snark, está bien. Tráelo a casa
por todos los medios: puedes servirlo con ensalada
y también vale para encender el fuego.

“Puedes buscarlo con dedales y buscarlo también con
cuidado. Puedes perseguirlo con tenedores y esperanza.
Puedes amenazarlo con una acción de los ferrocarriles
y puedes cultivarlo con sonrisas y jabón.”

“¡Ese es exactamente el método!, aseguró el capitán
en un súbito paréntesis, “Así es exactamente como
siempre me han dicho que debería
intentarse la captura del snark.”

“Pero, ¡oh refulgante [refulgente+fulgurante] sobrino mío!, ¡guárdate bien
si tu snark es un búcham!, porque entonces
súbita y suavemente desaparecerás,
¡y no aparecerás nunca jamás!”




 

“Esto es…, esto es lo que oprime mi alma
al recordar las últimas palabras de mi tío.
Mi corazón se asemeja a un cuenco
rebosante de cuajos palpitantes.”

“Esto es…, esto es…” “¡Ya nos lo has dicho antes!”,
dijo indignado el capitán.
Y el panadero contestó: “Déjeme decirlo otra vez.
Esto es…, esto es lo que me produce pavor.”

“Todas las noches entablo en sueños
una lucha delirante con el snark.
Y en esas fantasías lo sirvo con ensalada
y lo uso para encender fuego.

“Pero si alguna vez tropiezo con un búcham, ese día,
al momento (de eso estoy seguro),
súbita y suavemente desapareceré.
¡Y esa idea no la puedo soportar!”

La caza del Snark II

ESPASMO II

EL DISCURSO DEL CAPITÁN


Al capitán todos le ponían en el alto candelero.
¡Qué porte, qué soltura y qué gracia!,
y ¡tan solemne también! Cualquiera podía ver que
era un sabio sólo con mirarle a la cara.

Había comprado un gran mapa que representaba el mar
y en el que no había vestigio de tierra;
y la tripulación se puso contentísima al ver
que era un mapa que todos podían entender.

“¿De qué sirven los polos, los ecuadores,
los trópicos, las zonas y los meridianos de Mercator?
Así gritaba el capitán. Y la tripulación respondía:
“¡No son más que signos convencionales!”

“¡Otros mapas tienen formas, con sus islas y sus cabos!
¡Pero hemos de agradecer a nuestro valiente capitán
el habernos traído el mejor —añadían—,
uno perfecto y absolutamente en blanco!”



PLANO DEL OCEANO


Esto era encantador, sin duda, pero enseguida descubrieron
que su capitán, en quien todos confiaban ciegamente,
sólo tenía una noción de cómo cruzar el Océano,
y ésta era ir tocando la campana.

Era pensativo y serio, pero las órdenes que daba
bastaban para desconcertar a toda la tripulación.
Cuando ordenaba: “¡Rumbo a estribor, pero mantengan la
proa a babor!”, ¿qué diablos debía hacer el timonel?

También, a veces, solían confundir el bauprés y el timón,
cosa que, según hizo notar el capitán, ocurría
con frecuencias en climas tropicales cuando el barco
está, por así decirlo, “esnarkado”.

Pero el problema principal estaba en la navegación,
y el capitán, perplejo y acongojado,
confesó que esperaba que, al menos, cuando el viento soplara
hacia el este, el barco no enfilara hacia el oeste.

Pero el peligro había pasado; por fin habían desembarcado
con sus baúles, maletas y sacos.
Sin embargo, la tripulación no quedó complacida con lo que
a primera vista descubrió: ¡despeñaderos y precipicios!

El capitán intuyó que estaban bajos de moral
y, con tono musical, les explicó algunos chistes
que reservaba para momentos de infortunio.
Pero la tripulación no dejó de lamentarse.

Sirvió a todos generosas copas de ponche
y les propuso sentarse en la playa.
Y todos convinieron en que su capitán tenía un porte
sublime, allí firme, aprestándose a soltar su discurso.

“¡Amigos, romanos y paisanos, prestadme vuestros oídos!”
(Todos eran muy aficionados a las citas;
así pues, brindaron a su salud y le dieron tres hurras.
Él, agradecido, les sirvió algo más de ponche.)

“¡Hemos navegado muchos meses, hemos navegado muchas
semanas (cuatro semanas cada mes, recordadlo),
pero hasta el momento (y os lo dice vuestro capitán)
ni hemos visto ni olido al snark!”

“¡Hemos navegado muchas semanas, hemos navegado muchos
días (siete días cada semana, os lo aseguro),
pero hasta ahora ni un snark
sobre el que posar nuestra amorosa mirada!”

“Venid y escuchad mientras os repito
las cinco señales inconfundibles
por las que reconoceréis con plena garantía,
donde quiera que estéis, el genuino snark.

“Digámoslas por orden. La primera es su sabor,
que es escaso y hueco, pero crujiente
como un abrigo que estuviese demasiado ajustado en la
cintura, con aroma a fuego fatuo.

“Tiene el hábito de levantarse tarde;
estaréis de acuerdo en que lo lleva demasiado lejos
cuando os diga que, a menudo, se desayuna para el té de las
cinco y que come al día siguiente.

“La tercera es su lentitud para entender un chiste.
Si te aventuras a explicarle uno,
suspirará como lo haría alguien profundamente desdichado,
y siempre se pone serio ante un juego de palabras.

“La cuarta es su afición a las máquinas de baño.
¡Siempre carga con una tras él!
Y está convencido de que añaden belleza al panorama;
una opinión discutible, a mi entender.

“La quinta es la ambición. Ahora convendrá
describir las diferentes especies,
distinguiendo los que tienen plumas y muerden
de aquellos otros que tienen bigotes y arañan.

“Pues aunque los snarks corrientes no hacen ningún daño,
creo que es mi obligación advertir que algunos son
buchams…” El capitán se interrumpió alarmado.
¡El panadero se había desmayado!

La caza del Snark

ESPASMO I

EL DESEMBARCO


“¡Excelente lugar para el snark!”, exclamó el capitán,
a la vez que desembarcaba con sumo cuidado a su tripulación:
ensortijando los cabellos de cada marinero en su dedo,
les ponía fuera del alcance de la olas.

“¡Excelente lugar para el snark!”, repitió,
como si esta sola frase debiera estimular a la tripulación.
“¡Excelente lugar para el snark!, y lo digo por tercera vez.
Recordad, todo lo que os diga tres veces es siempre verdad.”

La tripulación estaba completa. Contaba con un limpiabotas,
un sombrerero que también hacía capuchas;
un abogado, a quien trajeron para que pusiera orden en sus
disputas; y un tasador, para que valorase sus pertenencias.

Un empleado de los billares, hombre de inmensa habilidad,
y que quizás se habría hecho con algo más de lo que
le correspondía de no haber sido por un banquero, contratado
con un enorme gasto, y que era quien administraba el dinero.

Un castor también había, que marcaba el paso sobre la
cubierta y que, a veces, se sentaba en la proa a hacer encaje.
A menudo les había salvado del naufragio, según explicó el
capitán, aunque ninguno de los marineros supo cómo.

Había un tipo famoso por la cantidad de cosas
que olvidó en tierra al embarcar
su paraguas, su reloj, todas sus alhajas y anillos
y la ropa que había comprado para la expedición.

Tenía cuarenta y dos baúles, todos cuidadosamente
embalados y con su nombre claramente rotulado en ellos;
pero, como omitió decir que los tenía,
todos se quedaron en la playa.

En realidad, apenas le importó la pérdida de sus ropas,
pues cuando embarcó traía puestos siete abrigos
y tres pares de botas. Lo peor de todo fue
que… ¡había olvidado completamente su nombre!





Respondía al grito de “¡eh!” o a cualquier grito fuerte,
como “¡fríame!” o “¡fría mi peluca!”
También, al de “¡como se llame!” o “¿cuál era su nombre?”,
pero especialmente a “¡como diantre se llame!”

Mientras que, para aquellos que preferían palabras más
concluyentes, tenía varios nombres; por ejemplo,
sus amigos más íntimos le llamaban “velilla”
y sus enemigos “queso tostado”.

“Su aspecto es desgalichado y su intelecto corto”,
solía hacer notar a menudo el capitán,
“pero su valor es perfecto y, después de todo,
esto es lo que se necesita con un snark.”

Solía bromear con las hienas y les sostenía la mirada,
con un impúdico movimiento de cabeza.
Y cuentan que una vez fue a pasear, zarpa con zarpa, con un
oso, “para mantener el ánimo”, según explicó.

Vino de panadero, y confesó cuando era demasiado tarde
—con lo que volvió medio loco al pobre capitán—
que sólo sabía hacer tarta nupcial, para lo cual debo decir
que ni había ni iba a haber ingredientes.

El último miembro de la tripulación necesita descripción
especial, aunque tenía un increíble aspecto de zopenco.
No tenía más que una idea, que era la del snark;
por ello el buen capitán le contrató al momento.

Vino de carnicero, pero declaró con gran seriedad,
cuando hacía una semana que el barco había zarpado,
que sólo sabía matar castores. El capitán se asustó:
vamos, que estaba demasiado aterrado para hablar.

Pero finalmente explicó, en tono trémulo
que sólo había un castor a bordo,
que era de su propiedad y tenía domesticado,
y cuya muerte deploraría profundamente.

El castor, que casualmente oyó esta observación,
protestó con lágrimas en los ojos
y dijo que ni siquiera el éxtasis de cazar el snark
podría compensar la funesta sorpresa.

Exigió enérgicamente que se transportase
al carnicero en un barco aparte.
Pero el capitán se negó a tomar tal precaución
porque no convenía al plan de la expedición.

“¡La navegación es siempre un difícil arte,
incluso con un sólo barco y una sóla campana!”, exclamo
el capitán, por lo que lamentaba tener que declinar
el hacerse cargo de otro más.

Lo mejor que podía hacer el castor, sin duda alguna,
era procurarse un abrigo de segunda mano a prueba de
cuchillos. Este fue el consejo del panadero. Y luego, que se
hiciera un seguro de vida en alguna compañía de renombre.

Esto sugirió el banquero y le ofreció en alquiler,
a precio módico, o en venta
dos excelentes pólizas: una contra incendios
y otra contra daños por el granizo.

Aún ahora, desde aquel triste día,
siempre que el carnicero aparecía por allí,
el castor miraba hacia el lado contrario
y se mostraba indeciblemente tímido.







domingo, 20 de noviembre de 2011

Domingo lluvioso, domingo dichoso.

     Buenos días,  ¿que tal lleváis el día? ¿Habeis votado?  Sé que muchos estáis, como se dice ahora indignados con todo, (antes se decía hasta los cojones, pero claro no queda bonito eso de 15-M, movimiento de los "Hasta los cojones") Bueno, a lo que iba, a los que estáis indignados y sentís la tentación de no votar, no lo hagáis, el voto es un lujo. Pensad en la cantidad de personas que no tienen ese derecho, que viven aún bajo el yugo de la opresión en todos los aspectos, aparte del material, que por lo visto es el que más nos afecta a nosotros, sin tener en cuenta que podemos decir con libertad todo lo que opinamos, pensamos y queremos.  Sí, que sin dinero no se puede vivir, lo reconozco, porque está todo preparado para el consumismo a lo bestia, sin ton ni son. Tener el dinero justo para la comida, pero sin despilfarros, para la ropa, cómoda y práctica, que se ve cada cosa por ahí, para el pago de nuestra luz, agua y demás, no creo que sea tan difícil. Pero es que hoy día lo queremos TODO, queremos salir, viajar, comprar joyas, coches caros, ropas absurdas e incómodas, en fin de todo. Claro habrá quién  me diga eso de , es que tenemos derecho a tener todo eso, ya, pero ¿lo necesitas? Y tener derecho a todo eso es quitarle ese derecho, seguramente, a otros. Esto es un mundo en equilibrio, y por esa regla de tres, cuando pones en un platillo de la balanza más de lo necesario, el otro platillo, por fuerza se va al garete, así que, moralmente, reconoced, ¿de verdad tenemos derecho a tenerlo TODO? Creo que no. Bueno, volviendo al tema de las votaciones, (me voy por los cerros de Úbeda que es un gusto)  debéis ir a votar, ese sí es un derecho que no desequilibra a nadie, votar, independientemente a quién se vote, es un lujo, un privilegio, es honrar a los que han sufrido por lograr esta democracia,  a los que incluso dejado la vida por ella. Debemos tener muy claro que es cierto lo del fin del mundo. Debemos poner fin a este mundo de despilfarros, contaminación, discriminación, asesinatos animales masivos, de todas las especies, humanos y no humanos, ahí no discrimino a nadie. Este es el fin del mundo que yo quiero. Menos materialismo, menos prisas, menos gastos de recursos naturales. Antes , hace apenas 200 años todo el mundo iba a todas partes, no había tanta prisa, no digo que volvamos atrás, que ni para tomar impulso retrocedo yo, pero sí, a la NO prisa, vivir para vivir, no malvivir para acumular riquezas. Bueno, y en cuanto a lo de domingo lluvioso, una de las ventajas de estar en el paro, es que en días como hoy no me mojo, aunque nunca me ha importado, reconozco que estar sentada en mi salita, con mi libro delante, la música muy bajita, y viendo la lluvia por la ventana... es el paraíso.
     Bueno, aquí lo dejo, sed buenos pero no tontos. Mañana más.

martes, 15 de noviembre de 2011

Maria la Magdalena

                           ESA GRAN DESCONOCIDA

    Siempre me han gustado y atraído las personas librepensantes, independientes, con su escala de valores alta, y a la vez humildes y sencillas.
    Pocas hay en verdad que llamen mi atención. Hay una sin embargo, que si me ha picado la curiosidad, por su ambiguedad, por su relativa independencia a la historia, por el desconocimiento que hacia su persona hay desde el principio de su vida. Esta persona, que no personaje, es María, la Magdalena.
     
    ¿Quién fué? Sin duda, persona de carne y hueso, sobre la cual han sido vertidas muchas especulaciones, versiones de su vida, andanzas y correrías.
    Yo no la voy ahora ni mucho menos a descubrir, pero sí a dar mi testimonio íntimo y privado que tengo sobre su figura.

    Creo que María era una más de los discípulos de Jesús, al menos al principio. Al ser mujer era mal vista por los hombres que los acompañaban. Jesús se apoyaba en ella, en su inteligencia, viveza e intuición femenina, todo esto hizo que Jesús viera en ella el bastón perfecto para, como hombre que era, dejarse caer, descansar y complementarse. Cuando Jesús eligió a sus discípulos, ya en su interior contaba con el complemento de María para sus planes. Poco importaba como lo vieran los demás. María era perfecta, independiente, inteligente, clara y práctica, aguda, cualidades todas imprescindibles para sobrevivir en esa época y con esos hombres, que relegaban a las mujeres a las más bajas condiciones, todo deberes, ningún provecho, ninguna utilidad, que no fuera la de gobernar una casa humilde y procrear.
    María fué un revulsivo para su época, aunque no se haya tenido, o querido tener conciencia de este hecho hasta casi nuestros días. Mi convicción es plena al creer que el discípulo amado de Jesús era ella, no tendría mucha lógica ni sentido que fuera un hombre. Por mucho que Jesús amase a todos, sí, los amaba, pero de de igual manera.
    Partiendo de la base que María es nombrada en los cuatro Evangelios (reconocidos oficialmente) como la que presenció la cruxifición de Jesús, ¿por qué no se la ha valorado en su justa medida? ¿Que intereses han hecho que su importantísima figura haya sido relegada a la de simple “pecadora”? Hecho que no me cabe ninguna duda que fué falseado por los hombres del momento para restarle su debido empaque. Que yo sepa en ningún escrito ni antiguo ni contemporáneo  se menciona de manera explícita que fuera ella tal pecadora, ni tal adúltera. Tan sólo Lucas (8:2) la identifica como poseída por siete demonios, vayan ustedes a saber que le pasaría de verdad a la pobre mujer.
    La importancia de María durante la vida de Jesús, fué, estoy convencida, mucha. La presencia femenina sin duda atraería a muchas mujeres,( que eran bastión no reconocido, de la sociedad de la época, como en todas,) hacia la figura del Jesús predicador. Bastión muy necesario para el equilibrio de la vida rutinaria, pero no reconocido y siempre ninguneado por la tradición machista imperante.
    No acabo de entender muy bien cómo pasó María a ser varón con el paso de los años, pues en tal fué convertida, a pesar de ser mujer de Jesús para todo, en lo bueno y en lo malo, en la vida, en la muerte y lo más importante, TRAS la muerte. La convirtieron en el discípulo amado de un plumazo, ¿razón? que después de la muerte de Jesús, que era el que mantenía a los hombres a raya, éstos en las épocas posteriores se tomaran la revancha y como no se atrevieron a borrar de la Historia a la amada María, la convirtieron en amado discípulo, así, todos tan contentos.
    Jesús, cosa que nunca entendieron ni compartieron sus apóstoles, nunca se opuso a la igualdad entre hombres y mujeres, a los demás les faltaba valor para ser tan radicales, o eran de mente roma y obtusa.
    La cuestión es que por qué, si María era la amada de Jesús, llámese esposa (griego) compañera (copto) o discípula (arameo) no se le ha dado más relevancia a su papel en la vida y obra de Jesús. No se hizo ni antes ni ahora, aunque bien es cierto que en el presente están saliendo a la luz multitud de escritos y textos en los que si parece que se está enmendando el error u olvido. Prueba de ello es que han salido a la luz dos fragmentos en papiro, y una traducción del copto, en los que se ve a María como parte importantísima, debido a la estrecha relación que mantuvo con Jesús. No es mucho, pero ya algo se va avanzando.
    Otro capítulo que me llama la atención, es cuando María se reune con los discípulos para contarles lo sucedido después de encontrar el sepulcro vacío. Les cuenta que vió  a Jesús resucitado, ahí es cuando se rompe del todo la tensa relación que había entre hombres y mujeres ( Pedro y María). Pedro está celoso de ella, no en vano le echan en cara que Jesús la amaba más que al resto, tanto hombres como demas mujeres. María acaba su narración y como ya he dicho antes, Pedro (secundado por Andrés) no la creen. Bien es sabido de la animadversión que siente Pedro hacia las mujeres, cuando pide a María que salga de entre ellos, pues las hembras no son dignas de la vida. Jesús le reprende diciendo: “He aquí que la inspiraré a ella para que se convierta en varón, para que ella misma se haga un espíritu viviente semejante (que no igual) a vosotros varones. Pues cada hembra que se convierte en varón entrará en el Reino de los Cielos.” (Según evangelio de Tomás)
    Ahí fué cuando Pedro se convirtió en piedra y empezaron todos los males en lo referente a la mujer y posterior invención de la iglesia.
    María, a mi entender, supo luchar por su amado Jesús en primer lugar, luego por ella misma y por sus convicciones , supo diferenciar su creencia espiritual del mundo material que sus pies pisaban. Se dió a conocer, supo competir con los hombres dando su testimonio, sin adornos ni melindres de su paso por la vida de Jesús, tanto vivo, como después de muerto. Antes, es lógico que no luchara por ello, ya que el mismo Jesús le apartaba todo lo malo, por eso, ella se hizo realmente fuerte despues de la resurreción.
    Para mi María, la de Magdala, esa gran desconocida, la de vida fascinante, fué una gran mujer, por afinidad a Jesús primero, y por derecho propio después. Fué, creo, una gran discípula, buena compañera, esposa amante y devota, y ¿por qué no? excelente y perfecta madre.

Los sin derechos.

     Hola a todo-as, hoy hace un día estupendo, habida cuenta de la tormenta de ayer, con esos rayos y truenos, y como llovía, ha amanecido todo limpito y reluciente. Bueno a lo que iba, estoy cada día más indignada, las empresas de todo tipo lo único que quieren es vender sus productos, a costa de lo que sea y de quien sea, no hay derecho que para vender un champú de esos que te hacen menear la melena como si tuvieras el mal de san Vito tengan que dejar medio muertos a miles de conejitos. O que para que mi bebé tenga la piel suavecita, (con agua calentita y jabón de aceite de oliva va que arde) otros bebés de otras especies tengan su piel en carne viva. Hoy voy a repasar los laboratorios que tan alegremente experimentan con animales distintos a nosotros, creo que sólo por ser distintos no tenemos derecho alguno a tomar sus vidas sin ton ni son. Son distintos en cuanto aspecto, en lo demás totalmente iguales en derechos. No hay nada que justifique estas atrocidades, ni loreal , porque yo lo valgo, ni dove, hay que suavecito es, ni que rico es el pienso de mi gato o perro, tampoco está justificado el maltrato y crueldad en los laboratorios farmacéuticos, no entiendo como probar un medicamento en un mono, conejo, perro o gato me va a beneficiar  a mi, ¿no hemos quedado que somos especies distintas?
     Joder, si tenemos problemas oculares, se prueban en ojos humanos, si hay problemas de cerebro, se abren unas cuantas cabezas de niños pequeños y listo, a estudiar, ¿qué? ¿hay algún escandalizado? ¿recuerda esto a ciertos personajillos de cierto país europeo durante cierto holocausto? Pues si, pero a eso precisamente me refiero, que TODO ser vivo sea de la especie que sea, tenemos los mismos sentimientos, miedos, padecemos los mismos dolores, tristezas, incertidumbres. ¿Está todo justificado en aras de la ciencia? ¿Y solo para "beneficio" de unas pocas especies? (La humana) Me río yo de esa ciencia, ¿en que se diferencian los que aún siguen moliendo huesos de tigre o extrayendo bilis de oso de los modernos laboratorios? EN NADA. ¿Y para qué lo hacen unos y otros? PARA NADA.
     ¿No es mejor volver a lo antiguo, que no menos sabio por ello? Podemos volver la vista atrás, y posar nuestros ojos de nuevo en las plantas, ellas tienen todos los secretos medicinales del mundo, ellas poseen el poder, plantas y minerales son la misma Naturaleza y en estado latente, vivo. Pero claro, esto es impensable, sería costosísimo, ya que para echar mano de las plantas, primero habría que cuidar el medioambiente, las aguas, los mares y ríos, habría que tener contaminación cero para que crecieran sanas, habría que tener en cuenta muchísimos factores, todos ellos fáciles y al alcance de cualquier multinacional. Pero es más barato torturar animales, total el coste es casi cero, basta con encerrarlos, y total, animales hay a patadas. ¿De qué me sirve a mi que maten a cientos de tiburones para arrancarles sus aletas? ¿Para una cápsula de su cartílago? ¿Para mi artrosis?  Hay productos cerámicos que palian igual, pero son más caros.  Pues con todo igual. Estoy más que harta de toda esta mierda, que como somos los amos y señores de la creación, pues hala, a patadas con todo. Sólo cuando se haya cortado el último árbol,  contaminado el último río, y exterminado el último animal, nos daremos cuenta de lo que realmente vale el dinero. ¡¡¡ NADA !!!
     Mañana más, sed buenos, pero no tontos.

domingo, 13 de noviembre de 2011

Mi calculadora no da para más

     Hola, buenas noches. Hoy me resistía a escribir nada, hasta que he visto un poco de tele. El primer titular, como no, las elecciones. He estado escuchando, viendo la pantalla, y de pronto me ha dado por pensar lo que casi todos los españolitos hemos pensado mas de una vez: ¿Cuanto (nos) cuestan las banderitas, carteles, desplazamientos en autobuses, comilonas, cafés, bolígrafos, pañuelos, abanicos, pancartas, etc.etc. que se sacan para estos menesteres? Seguro que cientos de miles de (nuestros) euros. Y digo yo, ¿Hay alguien que base su voto en verle los caretos a los candidatos en los banderines o carteles? Creo que no, de todas formas si hay alguien que si, que me lo haga saber, que me interesa mucho. Otra cosa que me ha sorprendido de lo rápido que ha ido a sido la dimisión de Berlusconi, eso sin duda va a ser un revulsivo para el resto de Europa, que se vayan agarrando los machos, que poquito a poco nos vamos a ir viendo en los titulares del resto del mundo. Primero Papandreu, luego Berlusconi, ¿quién es el siguiente? Que lo hagan a piedra-papel-tijeras. Bueno, visto lo visto, y que es Domingo, que es la hora de la duchita, el colacao calentito (ya pega) y del pijamita, os voy a ir dejando, que vuestra compañia me es muy grata, pero lo anteriormente dicho me seduce más.
     Sed buenos, (pero no tontos) y hasta mañana.

sábado, 12 de noviembre de 2011

A vueltas con los juguetes!!! (Y sus precios desorbitados)

     Hola!! Aquí estoy de nuevo, hoy quiero expresar libremente mi opinión (jo, cada día me gusta más) de los juguetes. Pues bien, se acerca la Navidad, época de regalos, época de niños sobre todo. Lo  malo de esto es que los niños no entienden ni deberían entender, de crisis, de malas rachas, de desempleos. Pero lamentablemente no hay mas remedio que ponerlos al día de estos sucesos, porque luego pasa lo que pasa, que a los pobres hay que negarles los regalos de santa Claus o los de los Reyes Magos, y eso no es justo. Ya tenemos el consabido catálogo del "cortinglés" por ahí, rulando de mala manera. Ahora bien, los juguetes, a esos precios, ¿quién se los puede costear? ¿Los hijos de los ministros? ¿los de los banqueros? Haber, que si mis niños quieren juguetes, ¿me tengo que ir al "veinteduros" de la esquina? ¿Juguetes no homologados? ¿Que no han pasado las debidas inspecciones? Pues yo me niego en redondo. Hay que hacer algo para que esta situación no llegue a más, cada vez hay más diferencias entre una clase social y otra. (Como odio esta frasecita) El "toisarás" lleno hasta los topes de juguetes caros, hermosos, relucientes, sin taras, genuinos, y la mayoría de los españolitos, este año al "todouneuro" , "todocien" o lo que prefiramos, a por unos juguetes falsos, de malísima imitación, que ni las pilas buenas les valen, (has de comprar por cojones, sí o sí, las pilas falsas también) y para qué queremos más, solo hay luego que sacar a los peques a la calle con sus carritos, sus peponas, sus patines, pelotas , etc, etc, y verles las caritas, cuando a unos le les deshacen literalmente los juguetes en las manos, y a otros, pues ya veis, les duran lo que les tienen que durar, un berrinche y otro nuevo, que pa eso son pudientes. Odio estas situaciones, y también el consumismo desmesurado, sobe todo por parte de los adultos, pero (aunque tampoco los niños me caen muy bien) los niños no saben de estas cosas, aunque mamá y papá se los expliquen, ellos oyen, pero por dentro esperan que la cosa no vaya con ellos. Los grandes almacenes deberían hacer un ejercicio de humildad, de solidaridad, y hacer algo por estos críos, un poquito de por favor, que estamos próximos a la Navidad, y hay muchos niños que se llevarán la desilusión mas grandes de sus vidas, cuando no reciban lo que han pedido, al menos los de calidad.
     Bueno, no espero ni mucho menos que esto solucione nada, pero al menos, lo he dejado dicho, que si no, reviento, y la verdad, es que no estoy por la labor.
     Hasta otra y portaos bien, que los pajecillos de los Reyes Magos andan ya por ahí, libreta en ristre para anotar quien se porta bien y quien no. (Y los chinos del "todounero" también.

viernes, 11 de noviembre de 2011

Pero qué ilusos somos

     Hola, hoy doblete!!
     He estado pensando, a veces no es malo, como nos quieren hacer creer. Bueno, pues he pensado, tras ojear un poco los periódicos y ver ciertas noticias, como por ejemplo ese asteroide que casi nos pasa "raspandito" o esos furiosos volcanes que nos "amenazan" (hay quien se lo toma como algo personal) y he llegado a la siguiente conclusión, si vivimos en una pompa de jabón en medio de una nada patente y latente, y el menos roce externo o una mínima presión interna nos puede borrar del mapa universal, ¿a qué tanto aspaviento? ¿a qué tantos sobresaltos? ¿a qué creernos que podemos (y debemos) comernos el mundo? No estaría de más una reflexión a nivel mundial, un reconocer que estamos aquí de prestado, que lo ignoramos todo de nosotros mismos, y más aún de lo que nos rodea, no entiendo como podemos estar siempre enconados contra algo o alguien, poniendo en ello un empeño ilógico. No sé muy bien a donde nos va a llevar esta situación , pero no hace falta ser muy Nostradamus que " digamus" para darse cuenta que realmente el fin del mundo está al alcance de la mano. El sistema financiero se tambalea, lógico que se haya desequilibrado cuando todo el dinero y riquezas está en un sólo sitio, los bolsillos de los usureros, perdón, banqueros,  mangantes, perdón, magnates, y demás buitrería,¡ uy!, perdón de nuevo, élite, (me hace falta un café, pa espabilarme). Bueno lo que quiero decir, es mi modesta opinión, que necesitamos un revulsivo, ya ha empezado con los movimientos de los mal llamados indignados, yo los llamo los HLC, (Hasta Los Cojones), espero que sin comportarse igual que los que ellos detestan, sin ponerse a su altura, vayan sumando adeptos o afines, y hagamos todos causa común. Porque lo que no puede ser de ninguna de las maneras es que la gente pierda sus trabajos, sus casas, esto de los desahucios me tiene frita, y nos quedemos el resto tan panchos, escondiendo la cara para retrasar nuestro turno, como cuando de pequeños en el colegio nos encogíamos en nuestro pupitre para que el maestro no nos preguntara. Esto no puede ser, y encima con el apoyo del gobierno, joder, que el gobierno somos todos, yo me niego a ser cómplice en eso. Bueno, de momento me voy a por mi café, porque esto me agota, me hago mayor, vieja, pero no por ello ni sorda ni tonta, quiero para mi futuro inmediato y mi presente, lo que tuve en mi infancia y niñez, quiero cosas sin aditivos, sin engaños, sin dobleces, quiero vivir y respirar sin tener la sensación de ser vigilada, de ser controlada, quiero vivir sin temor a levantarme un dia y encontrarme desvalijada, no de cosas materiales, que me importan un pimiento, si no desvalijada a nivel evolutivo, a nivel cognitivo. En fin, creo que por hoy está bien la cosa, (creo), porque he vuelto con ganas, con muuuuuuuuuchas ganas.
     Hasta la próxima.

¡¡Uy,uy!!

     Muy buenos días a todos, ¡¡he vuelto!! Y espero que para quedarme un tiempo. Espero que los que me leíais hasta ahora sigáis por ahí, y estéis bien de salud, porque de ánimo ya me imagino como estaréis. Bueno, a lo que iba. Hoy quiero expresar libremente (que "potito" ma quedao) mi opinión sobre la que se nos viene encima. El dia veinte elecciones. ¿Y a quién elegimos? Rubalcaba? Rajoy?  Es como que te den a elegir entre un "cortao" y un "descafeinao" (de sobre o de máquina me da igual)
     ¿Dónde está la cafeína? ¿La fuerza para hacernos crrer que son distintos? ¿Se siguen creyendo que estamos en la inopia? ¿Se lo seguiremos permitiendo todo? Yo por mi parte estoy como los "venaos" de Ubrique: berreando. No podemos quedarnos de brazos cruzados y esperar que nos traigan las cositas a casa. Hay que levantarse, salir y luchar. Ir a votar, pero luego hay que ser consecuentes con lo que se vota, y estamos en nuestro derecho de exigirles que cumplan, no con lo que prometen, si no con lo que deben hacer, que es velar por los intereses de todo el conjunto español. Hace unos años, el señor Chaves "prometió" por Andalucía que si salía ganador, el acceso a internet sería gratuito. Pues yo lo tengo que pagar, y eso, pequeña mentira, pero mentira al fin y al cabo, le ha valido a que nadie lo tenga en consideración, que nadie le crea, y al final salió, vaya si salió, pero por patas, que aquí, Andalucía nadie le quiere. Son pequeños detalles los que realmente cuentan, porque al fin y al cabo todas las grandes cosas se componen de infinidad de cosas pequeñitas. Yo voto por lo pequeño, por lo delicado, por lo sutil, y a mi  no me vale que me prometan grandes cosas, porque no me las creo. Lástima que nos hagan "hocicar" en sólo estos dos, el "cortao" y el "descafeinao" Yo quiero un dolce gusto, un capuchino, un extra cremoso, un sólo arábigo, un colombia puro..., yo quiero CAFE, no sucedáneos de baratillo.  Pero lo malo es que no están en el mercado. Así que entre esas dos ofertas, ¡¡me pido un colacao!!
     Que seáis buenos y hasta otra.